CARTA DE UN PERRO: «¡Esto es lo que quiero hacer en Semana Santa!»


perro y chica de snau

Ha pasado algo inesperado en nuestra redacción. Uno de nuestros clientes nos ha enviado la carta que le ha escrito su perro para decirle qué le preocupa sobre las vacaciones humanas.

Esta mañana estaba siendo un día normal en la redacción de Snau: café y perros madrugadores corriendo de un lado para otro. Aún quedaban cosas por recoger de la jornada de adopción que organizamos este finde. Por eso, he tardado más de lo normal en sentarme en mi mesa.

Cuando por fin he podido empezar a chequear la bandeja de entrada de mi Gmail con un fox terrier monísimo en el regazo, he visto un mail con el asunto «carta de mi perro para mí» que ha despertado mi curiosidad. Aunque me quedaban varios emails por ojear antes de llegar a este, decidí saltarme mis propios protocolos y clickear a tan misteriosa carta.

El mail resultó ser de uno de nuestros clientes que aseguraba haberse encontrado esta carta escrita en el salón de su casa y firmada por su perro. Puede parecer sorprendente, pero no es la primera vez que oigo que un peludo se comunica de esta forma con su dueño.

Aun así, no es algo que pase todos los días, por eso, he decidido compartir con vosotros la carta de este peludo a su dueño.

Carta de un perro a su dueño

Queridos papá y mamá,

No hay palabras en idioma humano o perruno para expresar cuánto os voy a echar de menos en vuestras merecidas vacaciones de Semana Santa. No os voy a engañar, me gustaría estar con vosotros. La verdad es que, si por mí fuera, estaría siempre pegadito a vosotros y, ya puestos, siempre de paseo.

Pero no pasa nada, entiendo que queráis iros a hacer lo que sea que hacéis los humanos en vuestro tiempo libre. Ahora, eso sí, ¡ojito donde me dejáis! He hablado con otros perros del barrio y he buscado por internet información sobre residencias caninas, albergues y cosas así… Y cuidado eh.

Hace poco leí este artículo en el blog de Snau (una gente muy maja) sobre las residencias para perros. Me dio un poco de mal rollo. Así que he pensado que, si os parece bien, vosotros os vais de vacas y yo me quedo con un cuidador solo para mí, que me tenga como un rey.

Como a veces me aburro cuando me quedo solo en casa, me pongo a buscar cosas con el ordenador. (Que por cierto, va bastante lento. Me ha contado Roco, el mastín de la vecina, que van a poner en el barrio una fibra óptica nueva. Osea, aplicaros el cuento y actualizaros que el 4G está a la vuelta de la esquina). La cuestión es que miré cómo funciona lo del alojamiento para perros con Snau y, por lo menos a mí, me da confianza.

Podemos conocer a nuestro cuidador antes de que yo me quede con él o con ella, además de que mantenemos contacto por WhatsApp mientras estáis fuera, y así os envío selfies. Creo que merecería la pena echarle un ojo al alojamiento con cuidadores de Snau. Ya que os vais, dejadme en buenas manos.

PS: no os vais a creer lo que ha pasado. Mientras estaba escribiendo esta carta ha entrado un perro malvado por la ventana y se ha liado a mordiscos con el cojín rosa del salón. ¡Menudo susto! Un desafortunado hecho en el que yo no he tenido nada que ver…

perros residencia